Desde su introducción en los Estados Unidos y luego en Francia en el 2000, los traficantes
de píldoras del día después están tratando de imponer su droga en muchos países.
La sincronización de las campañas de promoción a través del mundo, así como las gigantescas
sumas invertidas, indican que la difusión de la píldora abortiva llamada "del día después"
representa para ellos un objetivo de principal importancia.
No les ha sido difícil imponer la droga abortiva en los países occidentales
descristianizados, como Bélgica, Canadá, Portugal, España, Italia, África del Sur, etc.
Las modalidades varían, pero el objetivo buscado es siempre el mismo: proveer esta droga a las menores, sin receta
ni control médico, gratuitamente y sin autorización de los padres.
Las agencias dela ONU abastecen también de esta mercadería a las poblaciones que sufren las consecuencias
de guerras o de catástrofes naturales.
Pero los pro-aborto han debido pagar coimas o subvenciones importantes a numerosos responsables
políticos de países que tienen leyes contrarias al aborto. Esa es la razón probable de que ciertos
países como Colombia, Uganda, Guatemala, México, Chile e Irlanda, acepten súbitamente la droga
abortiva.
Existen, empero, puntos de resistencia al cartel de la droga abortiva:
en Gran Bretaña, nuestros amigos
de la SPUC (Sociedad por la Protección de los Niños no nacidos) han comprendido que su lucha contra el aborto
no sería creíble mientras no denunciaran también los abortos debidos a los "contraceptivos".
Han iniciado una acción judicial contra la distribución de la droga, por el doble motivo de que ella no respeta
la ley de aborto de 1967, y de que constituye un aborto involuntario inducido, lo cual es ilegal. El proceso está
previsto para el 12/02/2002. Esto no impide que la ASA (equivalente inglés de la Oficina francesa de verificación
de la Publicidad) procure censurar las publicaciones de nuestros amigos ingleses, con el pretexto de que el gobierno inglés
no cree en el aspecto abortivo de las píldoras del día después...
en Chile, la comercialización
de la píldora del día después, desde marzo de 2001, ha sido cuestionada ante la justicia. La Suprema Corte
ha dado razón a nuestros amigos, prohibiendo dicha comercialización a fines de agosto, por tratarse de una
droga abortiva que contraviene así a la Constitución chilena. Esto no le conviene a la OMS, que teme la extensión
de la interdicción a los dispositivos intra-uterinos (otro abortivo), ni al gobierno chileno, que quiere hacer producir
la misma droga en otra parte bajo otro nombre; el 11 de octubre obtuvo la decisión de una Corte de Apelación
en este sentido, y el 12 reinició la distribución. Nuestros amigos están tramitando una respuesta jurídica
a este gobierno arrogante...
la Iglesia Católica condena masivamente
el uso de las píldoras del día después, que considera abortivas. También lo hace la Iglesia Anglicana.
También lo hacen los Musulmanes ingleses...
La propaganda en favor de la píldora del día después pretende que ésta
disminuye el número de abortos, pero la experiencia demuestra hoy que el número de abortos instrumentales
no se reduce, y que a éstos se agregan ahora los abortos químicos inducidos por dichas drogas; sin hablar
del aumento de la promiscuidad sexual. Todo esto era previsible, y no cabe ninguna duda de que los verdaderos objetivos
de los promotores de las drogas abortivas son en realidad :
corromper a los jóvenes
para mejor manipularlos,
lograr la legalización del
aborto allí donde todavía no existe,
aumentar el número de
abortos.
En Francia, algunos médicos pro-vida han dicho que tienen dudas sobre los efectos
abortivos de la píldora del día después Norlevo ; pero la duda debiera llevarlos a aplicar el principio
de precaución. Los mejores especialistas mundiales, entretanto, continúan afirmando el carácter abortivo
de las píldoras del día después.
Sorprende, por otra parte, ver el silencio que mantienen los médicos franceses sobre los efectos abortivos de las
píldoras llamadas "contraceptivas". Hablar del tema sería políticamente incorrecto, podría
espantar a la clientela, pero en el plano científico gozaría de solidez. Así, nuestra publicación
en Internet registra numerosas reacciones negativas sobre el tema; pero dichas reacciones se traducen generalmente por insultos
o afirmaciones perentorias, nunca por argumentos fundamentados o inteligentes.
Habrá que esperar quizá los procesos de las víctimas de estas drogas.
En Gran Bretaña, 122 familias de víctimas, muertas (o inválidas) por causa de las píldoras de
tercera generación (las que supuestamente tienen menos efectos nocivos), han iniciado trámites judiciales
contra 3 fabricantes...